Cuando nacemos, nuestro cerebro aun no ha adquirido conocimientos. Sin embargo, sí percibe cuándo tiene hambre, sueño o malestar. Podríamos decir que está expuesto a una rutina biológica para sobrevivir y para eso es muy listo y rápido. Aunque cuando se trata de mantener ciertos hábitos, el cerebro se vuelve algo perezoso.
LA IMPORTANCIA DE MANTENER BUENOS HÁBITOS
Al poco tiempo de nacer, aprendemos intentando reproducir lo que vemos, para hablar, andar, utilizar las manos y coordinar hasta que el cerebro lo automatiza. Adquirimos la habilidad a base de repeticiones, porque imagino que no te acuerdas del primer día en que diste los primeros pasos, ¿cierto? El ser humano no nace caminando, para ello, deberá adquirir una serie de habilidades a medida que vaya creciendo.
¿Qué viene después de aprender a caminar? Pues que puedes subir escaleras, saltar, correr, montar en bici, trepar, bailar… Lo mismo ocurre con el habla o la escritura.
¿QUÉ PASA SI NO QUIERES APRENDER?
Imagínate por un momento que hasta ahora no has necesitado pensar, caminar, escribir, leer, hablar, aprender... porque alguien lo ha hecho por ti. Pensar esto a estas alturas cuando ya somos independientes (o casi) parece una locura ¿verdad? Da pereza y miedo imaginarlo.
Queremos ser libres, autónomos y vivir de la mejor forma posible, y no me refiero a económicamente, que también, sino personal. El problema surge cuando nuestros pensamientos nos contaminan. Alguna vez te puedes saltar algún hábito, no pasa nada por ello. Pero si se trata de algo recurrente y que va creciendo, te conviertes en una influencia negativa para ti mismo/a sin darte cuenta. Quienes lo ven son los que están cerca de ti, la familia, los amigos o la pareja. Los hábitos, al fin y al cabo, son los que también te definen.
Es importante crear hábitos para lograr tus objetivos y seguir avanzando.
ELIMINAR LOS MALOS HÁBITOS
Los buenos hábitos se consiguen a base de repetirlos, al igual que cuando somos niños. Repetimos una y otra vez hasta que nuestro cerebro lo automatiza prácticamente sin esfuerzo.
Olvídate de dramas, especialmente cuando se trata de estudiar o trabajar. A nadie le gusta salvo que estés haciendo algo que te apasione. Pero ser constante te ayuda a obtener tu recompensa. Nadie dice que sea fácil, aunque sí es posible y de sobra demostrado.
Para los que lo ven todo blanco o negro, pensad que también está el gris, no hay que ser extremista.
Por otro lado, mantener los buenos hábitos te ayudará a sentirte menos culpable. Si un día algo te sale mal, vuelve a intentarlo al día siguiente y sigue esforzándote, tú puedes.
Hay personas que creen adivinar el futuro. ¿A qué viene esta afirmación ahora? Pues verás, todos en algún momento nos hemos imaginado un momento futuro en el que todo podría salir mal. Si te anticipas, es probable que las cosas salgan mal porque así lo visualizas y lo único que vas a lograr es tirar la toalla.
En lugar de eso, debes definir tus metas, proyectarlos y ser progresivo. Si vas con prisas es posible que tengas un subidón y eso puede causar ansiedad si tu resultado no es el que esperabas, intenta dosificar. Es mejor estar en el presente y visualizar a corto plazo, e ir avanzado de forma gradual.
Si hay algo que te detiene para lograrlo, deberías revisar tu actitud y retroceder un poco. Ir hacia atrás para verlo con otra perspectiva, no para volver a ser lo que no quieres ser. Elimina los obstáculos y planea alguna estrategia.
LA DISCIPLINA ES IMPORTANTE PARA CREAR BUENOS HÁBITOS
Por poquito que sea, debes hacer ejercicio, tu cuerpo y tu mente lo agradecerán. Practica la meditación o el mindfulness para aprender a relajar la mente y el cuerpo con sus técnicas. Este tipo de actividades tienen un enorme impacto positivo cuando se tiene depresión, algún trastorno del sueño o hiperactividad. Consigue aliviar el estrés, mejora el estado de ánimo, te ayuda a dormir mejor e influye en la memoria.
¿CUÁNTO TIEMPO SE TARDA EN ADQUIRIR NUEVOS HÁBITOS?
Pues todo depende de cada persona. Desde 3 semanas a medio año o más. Aquí no existen los milagros, el milagro eres tú y te toca a ti querer lograrlo teniendo en cuenta las circunstancias de cada uno. No existen panaceas para hacer click en tu cerebro y ala! Lo he logrado en una semana!
Hay que ser realistas, con objetivos y ser sensatos. Si de verdad crees que no puedes hacerlo por ti mismo, hazlo con la ayuda de un terapeuta o un coach para que te haga abrir los ojos en caso de bloqueo mental. De hecho, muchos empresarios, empleados, deportistas, artistas o entrenadores lo hacen.
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